Cada lunes se me encoge el corazón viendo las desventuras de los Reyes Católicos y todas las triquiñuelas, alianzas y pactos que tuvieron que urdir para garantizar la unión y hacer más sólidos sus reinos. Me ha resultado agobiante vivir su búsqueda de un heredero y muy triste su destino, al perder a su único hijo varón y años después a su nieto, llamado a ser el heredero de los reinos de Castilla, Aragón y Portugal. ¿Y la agonía de Juana "La Loca" por la ansiada llegada de un varón?
Entonces no puedo evitar pensar "con lo fácil que me ha resultado a mí concebir varones". Si hubiera sido Isabel La Católica hubiera superado esa parte de la historia de forma más airosa. Pero no soy la Reina Isabel, aunque si la Reina de mi casa ;) y de momento, aunque tengo varones que garantizan mi reino, no dispongo de heredera para mis muñecas y demás enseres sentimentales que he ido atesorando desde mi más tierna adolescencia. Porque cuando me imaginaba con hijos, me imaginaba una hija, así que con un churumbel azul y otro en camino, he tenido que cambiar el chip.
Ahora lamento profundamente no haber guardado con el mismo celo, el scalextric o los clips de playmovil con los que solía jugar con mi hermano; ni siquiera me dio por guardar cuentos en los que las protagonistas no fueran las princesas Disney.
En mi proceso de conversión a Reina Madre de mis Príncipes he ido dando forma a una serie de reivindicaciones que quiero compartir desde este blog y a las que espero os suméis todas las madres de hijos varones.
-Vale que las mamás de "útero azul" no compramos vestidos, pero eso no significa que no tengamos derecho a poder elegir entre ropa bonita. Nuestros niños también pueden inspirar colecciones de moda originales, con diseños y tejidos diferentes. Con un niño también se puede disfrutar de la moda.No queremos un montón de estanterías con lazos y volantes, frente a una aburrida estantería de camisas y pantalones. Mensaje para los diseñadores: Lo azul también puede ser tu musa y las madres de "útero azul" te lo agradecerán infinitamente.
-Queremos que se respete el color azul. Porque las madres con niñas pueden elegir entre muchos colores, pero si se decantan por el azul, dejan temblando a las mamás de niños para los que "jamás de los jamases" podremos escoger el color rosa. Menos mal que de un tiempo a esta parte se ha puesto de moda el color beige, territorio neutral ;)
-A ver, tener un segundo hijo varón no es una lástima. ¡De verdad! estoy cansada de que cada vez que me preguntan el sexo de mi bebé y descubro su identidad azul, las mujeres (que no los hombres) me respondan con una mueca seguida de "es lo mejor para ellos, así jugarán juntos" dándome por hecho que desde luego para mí no... ¡Incluso las más osadas me lo dicen claramente a la cara! "Tendrás que ir a por el tercero a ver si es niña" ¿Y qué sabrán ellas de lo que yo quiero? Da igual que sea en la consulta del pediatra, en la cola del supermercado, en el parque, en la parada del autobús, en una cafetería...esta reacción está bastante extendida. ¡Pero bueno! basta ya, desde aquí reivindico los privilegios de ser Reina Madre de sus Príncipes. (Si Isabel La Católica levantara la cabeza).
Tener un hijo ya de por sí es una bendición, muchas mujeres no pueden, ser mamá para mí es un privilegio, y si es cierto que durante el embarazo puedes tener tus preferencias, cuando tienes a tu hijo, lo quieres con locura porque es el tuyo.
-¿Qué es eso de que los niños son más traviesos y las niñas más tranquilas? en mi caso, el tranquilo fue mi hermano y la que no paraba quieta yo. No comulgo con las generalidades, si son más cariñosos o menos, más independientes, más brutos...eso depende de la personita, no de su sexo. Aunque confieso que me persigue la sombra del rumor de que el segundo hermano suele ser mucho más trasto...
-Terminemos con la figura de la "suegra", esa "enmadramaridos" que te roba a tu hombre. No quiero entrar en polémicas, pero a ver quien conoció primero a ese hombre...¿Quién le crió? ¿quién se levantó por las noches para cuidarle? ¿quién se quedó en vela cuando estaba enfermo? ¿quién le educó? ¿quién le regaló su tiempo y su energía? (empiezo a pensar como suegra, es inevitable). Como futura Reina Madre hasta el día en que me convierta en "suegra", me solidarizo con ellas y con ese lastre de mala fama que se ha tejido en torno a su nombre ;) Porque en nuestra sociedad está bien visto e incluso es "lo que debe ser" que la relación entre madres e hijas sea estrecha, que la hija sea para los padres, que con un yerno se gane un hijo...ay! pero si se trata de los hijos... que abandonen el nido y la madre se fastidie (cómo si no lo hubiera criado igual) porque si no es un "enmadrado".Futuras nueras aún en pañales, pensad que algún día vosotras también seréis suegras.
En fin, en próximas entregas os iré contando cómo se lleva esto de estar rodeada de testosterona y "pajaritos", con el color rosa relegado al reducto de mi ropero, porque puedo hablar de las relaciones madre e hija, como hija, pero de las relaciones madre e hijo, podré hablar como madre :)
Un beso,
Valentina ♥
-A ver, tener un segundo hijo varón no es una lástima. ¡De verdad! estoy cansada de que cada vez que me preguntan el sexo de mi bebé y descubro su identidad azul, las mujeres (que no los hombres) me respondan con una mueca seguida de "es lo mejor para ellos, así jugarán juntos" dándome por hecho que desde luego para mí no... ¡Incluso las más osadas me lo dicen claramente a la cara! "Tendrás que ir a por el tercero a ver si es niña" ¿Y qué sabrán ellas de lo que yo quiero? Da igual que sea en la consulta del pediatra, en la cola del supermercado, en el parque, en la parada del autobús, en una cafetería...esta reacción está bastante extendida. ¡Pero bueno! basta ya, desde aquí reivindico los privilegios de ser Reina Madre de sus Príncipes. (Si Isabel La Católica levantara la cabeza).
Tener un hijo ya de por sí es una bendición, muchas mujeres no pueden, ser mamá para mí es un privilegio, y si es cierto que durante el embarazo puedes tener tus preferencias, cuando tienes a tu hijo, lo quieres con locura porque es el tuyo.
-¿Qué es eso de que los niños son más traviesos y las niñas más tranquilas? en mi caso, el tranquilo fue mi hermano y la que no paraba quieta yo. No comulgo con las generalidades, si son más cariñosos o menos, más independientes, más brutos...eso depende de la personita, no de su sexo. Aunque confieso que me persigue la sombra del rumor de que el segundo hermano suele ser mucho más trasto...
-Terminemos con la figura de la "suegra", esa "enmadramaridos" que te roba a tu hombre. No quiero entrar en polémicas, pero a ver quien conoció primero a ese hombre...¿Quién le crió? ¿quién se levantó por las noches para cuidarle? ¿quién se quedó en vela cuando estaba enfermo? ¿quién le educó? ¿quién le regaló su tiempo y su energía? (empiezo a pensar como suegra, es inevitable). Como futura Reina Madre hasta el día en que me convierta en "suegra", me solidarizo con ellas y con ese lastre de mala fama que se ha tejido en torno a su nombre ;) Porque en nuestra sociedad está bien visto e incluso es "lo que debe ser" que la relación entre madres e hijas sea estrecha, que la hija sea para los padres, que con un yerno se gane un hijo...ay! pero si se trata de los hijos... que abandonen el nido y la madre se fastidie (cómo si no lo hubiera criado igual) porque si no es un "enmadrado".Futuras nueras aún en pañales, pensad que algún día vosotras también seréis suegras.
En fin, en próximas entregas os iré contando cómo se lleva esto de estar rodeada de testosterona y "pajaritos", con el color rosa relegado al reducto de mi ropero, porque puedo hablar de las relaciones madre e hija, como hija, pero de las relaciones madre e hijo, podré hablar como madre :)
Un beso,
Valentina ♥